El Liverpool perdonó la vida al Spartak Moscú (1-1) en un partido en que el brasileño Coutinho marcó el gol del equipo inglés, al que le faltó pegada.
El elenco de Jürgen Klopp tuvo oportunidades para sentenciar el partido ya en los primeros 45 minutos y perdonó la vida a su rival al final del duelo.
El Spartak “golpeó” primero, de falta, a los 20 minutos y Coutinho empató poco después, pero en el resto del lance, a los ingleses les sobraron delanteros y les faltaron ideas.
Tras el empate en casa ante el Sevilla (2-2), Klopp volvió a poner en liza un equipo muy ofensivo, mientras que el italiano Massimo Carrera optó por salir con cinco defensas.
Coutinho, que marcó un golazo de falta el fin de semana en Leicester en su regreso al equipo tras semanas sin apenas jugar, volvió a ser titular, al igual que el español Moreno, mientras Lallana aún no se recupera de sus molestias.
El Spartak, que no acogía un partido de Liga de Campeones desde hace cinco temporadas, no contó con dos de sus puntales (por lesión): el ruso Glushakov y el holandés Promes.
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