Manchester United sufrió pero acabó ganando 1-0 al CSKA Moscú, gracias a un gol de su líder Wayne Rooney, este martes en la cuarta jornada de la Liga de Campeones, en la que dio un paso importante para alcanzar los octavos.
Después de 403 minutos sin marcar y tres empates 0-0 consecutivos, Rooney consiguió romper la mala racha con un potente remate de cabeza (79’) bajo la lluvia en el estadio Old Trafford.
Este gol permite a los Reds Devils alcanzar la cabeza del grupo B con 7 puntos. En segundo lugar queda el PSV Eindhoven, que este martes ganó 2-0 al Wolfsburgo, tercero. Ambos tienen 6 puntos, mientras que cierra la llave el CSKA con 4.
El equipo dirigido por el holandés Louis Van Gaal mereció la victoria. Buscó el gol de todas las maneras posibles ante un rival que optó por dejar jugar y buscar su oportunidad en algún momento de relajación de los locales.
Los jugadores dirigidos por Leonid Slutski estuvieron a punto de cumplir con su misión si Chris Smalling no hubiera taponado un disparo del marfileño Seydou Doumbia (78’), cuya entrada en el campo reactivó al equipo moscovita.
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