La derrota en Champions ante el Manchester United dejó muy tocado a un Chelsea que recibía al colista de la Premier en Stamford Bridge. A priori era un partido ideal para recuperar la confianza y llevarse los tres puntos con facilidad, pero el guión del choque demostró que el Wigan no iba a vender cara su derrota. Fernando Torres no fue titular y tuvo que esperar a la segunda parte para saltar al césped.
Comienzo dubitativo
Los primeros compases del partido tuvieron un claro color visitante y el equipo de Roberto Martínez buscó dar la sorpresa desde el inicio. El Chelsea tardó en asentarse en el terreno de juego, pero cuando lo hizo dispuso de alguna ocasión aislada de Drogba y Malouda. El asedio final de los 'blues' no modificó el resultado y ambos equipos se marcharon al descanso con empate a cero en el marcador.
Salida de Torres
En la reanudación el juego del conjunto de Stamford Bridge no mejoró y Ancelotti decidió sacar a Fernando Torres. Nada más salir el español llegó el único tanto del partido. Un saque de esquina acaba con el balón en las mallas tras aprovechar Malouda una serie de rechaces dentro del área. El gol no debió subir al marcador por una falta de Torres sobre el portero Al Habsi.
El resto del partido fue un monologo del Chelsea y un intento tras otro de Torres de romper su particular maldición. No hubo suerte y la buena participación del '9' se quedó nuevamente sin premio.
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