El Stoke City recibía al Everton en el Britania Stadium en un partido en el que no se jugaban nada ya que el Stoke City había conseguido la permanencia y el Everton está lejos de los puestos europeos.
El equipo local dirigido por Tony Pulis presentó el siguiente once titular: Begovic, línea de cuatro con Upson, Shawcross, Wilson, Huth. En la medular Walters, Whitehead, Delap y Etherington y en la punta de ataque Jones y Crouch. Los visitantes dirigidos por David Moyes salió con: Howard en portería. Hilbert, Jaglielka, Heitinga y Distin en defensa. Anichebe, Osman, Fellaini, Pienaar en el medio y arriba Cahill y el bosnio Jelavic.
El partido presagiaba una tarde divertida en el Britania Stadium con dos equipos con los objetivos cumplidos y sin miedo a perder. Las primeras ocasiones fueron para los locales con las saques de banda del famoso mediocentro Delap. Crouch y Shawcross dispusieron de varios remates de cabeza que se fueron lejos de la meta de Howard. A medida que avance el tiempo, el Everton se hacía con el partido de la mano de Fellaini y Anichebe hasta que el nigeriano se lesionó. David Moyes decidió meter a Magaye Gueye, que le aportaría velocidad y verticalidad. Las ocasiones se sucedían para los Toffes. Pienaar, de disparo lejano, y Jelavic, de remate de cabeza, hicieron lucirse a Begovic que estaba teniendo bastante trabajo durante los minutos finales. Cuando todo parecía llegar a tablas al descanso en el minuto 45 una falta sacada rápido por Osman, la controla Hibbert y la centra al área donde Cahill remata y rebota en dos contrarios y se cuela en las redes de Begovic. Sin tiempo para más el árbitro señaló el túnel de vestuarios.
La segunda parte fue más intensa y más abierta. Las llegadas al área eran constantes por parte de los dos equipos. El Stoke City se vino arriba durante los primeros minutos mientras que el Everton buscaba sentenciar a la contra. Los locales bajaron el ritmo pasado el ecuador de la segunda mitad pero ahí Tony Pulis decidió hacer un triple cambio: Whelan por Walters en una decisión táctica y en una decisión emocional a Delap por Fuller y Crouch por Jerome para que el Britania Stadium ovacionara a sus dos estandartes. Corría el minuto 69 cuando Jerome tocaba su primer balón y después de irse de dos contrarios batía a Howard. El Stoke empataba y el Britania se ponía en pie para aplaudir a su equipo. En los minutos finales el Stoke pudo ganar con dos ocasiones que Jones mandó fuera de la meta de Tim Howard.
El árbitro pitó el final y los dos equipos enfilaron túnel de vestuarios. Un partido muy intenso y atractivo por la posición en la tabla de los dos conjuntos que el año que viene se volverán a enfrentar.
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