Un gol del veterano delantero francés Thierry Henry en el tiempo de descuento dio el sábado la victoria en el feudo del Sunderland al Arsenal (1-2), que remontó un resultado adverso en los últimos minutos.
Henry, de 34 años, cedido durante dos meses por los New York Red Bulls al equipo que le convirtió en una estrella, acercó a los Gunners a puestos de UEFA Champions League al rematar en el minuto 90 un centro del ruso Andrey Arshavin.
Antes, el irlandés James McClean había adelantado a los locales en una jugada desafortunada a veinte minutos para el final y, cinco minutos después, el galés Aaron Ramsey había devuelto la igualdad al marcador.
Los Gunners fueron dueños del partido durante la primera mitad, si bien adolecieron de falta de agresividad en el ataque y provocaron pocos problemas al guardameta belga Simon Mignolet.
La ocasión más clara del primer tiempo llegó en el minuto 29 de las botas del holandés Robin Van Persie, que se ha mostrado intratable durante las últimas jornadas y lidera el ránking de máximos goleadores de la Premier League con 22 tantos.
El centrocampista checo Tomas Rosicky y el joven inglés Oxlade-Chamberlain, de tan solo 18 años, se asociaron para habilitar en el interior del área pequeña al holandés, cuyo remate salvó "in extremis" el defensa inglés Michael Turner.
El guión del encuentro no sufrió alteraciones hasta el 70 de la segunda parte, cuando una jugada insólita adelantó a los locales, cuando el irlandés James McClean sacó ventaja de una lesión del alemán Per Mertesacker.
La pierna izquierda del defensa del Arsenal falló cuando el alemán se giró para controlar en la zona de tres cuartos un esférico que, finalmente, quedó abandonado en la frontal del área del guardameta polaco Wojciech Szczesny, que vio como McClean se plantaba solo ante él y remataba a placer.
Ese lance desafortunado despertó a los Gunners, que sólo tardaron cinco minutos en devolver el equilibrio al marcador con un disparo lejano y raso del galés Aaron Ramsey, que golpeó en el palo izquierdo de la meta de Mingolet antes de terminar en la red.
Cuando todo parecía listo para que el choque concluyera en empate, apareció de nuevo uno de los jugadores más admirados por los hinchas de los Gunners.
Henry, que forjó su carrera en Anfield y ha vuelto cedido a Londres durante dos meses, remató a bocajarro un centro de Arshavin para sellar la victoria ante el Sunderland, sumar tres puntos para el Arsenal y alcanzar al Chelsea en el cuarto puesto de la tabla, que da acceso a la UEFA Champions League.
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